lunes, 13 de febrero de 2012

Nuevo empate de un Villa del Río empeñado en complicarse la existencia.

Crónica partido 22ª jornada de liga de Regional Preferente de Córdoba.
 

C.D. Alcázar 1 Villa del Río C.F. 1


Alcázar- Claudio, Juanlu (Pedradas min. 55), Sergio, Javi Muñoz, Luís, Castro, Chechu, Pedro (Alfonso min. 55), Tono, Toreri (Antonio Manuel min. 73) y Alberto (Turu min. 65).

Villa del Río- Zamora, Rubio, Antonio, Elena, Montilla, Javi Nieto, Juan Carlos, Jacinto (Yedres mín. 77), Navas, Cris y Juanma (José Luís min. 70).

Árbitro: Montenegro Rubiano. Estuvo auxiliado en las bandas por Reyes Criado y Luque Cabello. Amonestó a los locales Toreri, Luís, Pedro y Alfonso y a los visitantes Cris, Juan Carlos, Elena, Javi Nieto y Montilla.

Goles- 0-1 (min. 41) Cris 1-1 (min. 60) Alfonso

Incidencias- Un cincuenta espectadores se dieron cita en el campo de fútbol del I.E.S. Seneca en una mañana soleada pero muy fría por el fuerte viento reinante.

 
Comentario- Firma: FRANCISCO J. GARCÍA


El Villa del Río no pasó del empate en su visita al campo del colista Alcázar tras un partido muy pobre y de escasa calidad. Es el séptima igualada de los villarrenses en los últimos ocho partidos y de nuevo dados los tropiezos de los rivales directos pierde una magnífica oportunidad para ir poniendo tierra de por medio con respecto a la zona de descenso. Además y por tercera salida consecutiva no ha sabido mantener hasta el final un marcador favorable.
 
Ni el fuerte viento reinante, ni el terreno de juego deben servir como excusa ante el mal partido que ofrecieron ambos conjuntos que demostraron que la clasificación no engaña y que las premuras clasificatorias que tienen son sencillamente debidas a sus tremendas limitaciones. Los locales al menos demostraron arrojo y orgullo, primero por que ya se sabe que el farolillo rojo pesa como una loza, segundo por que venían de encajar media docena de goles en Puente Genil y tercero por que ni con un gol en contra en un minuto de los llamados psicológicos les hizo perder la cara al partido. Más bien todo lo contrario, desde el pitido inicial intentaron hacerse con el control del juego aunque fuera siempre más por la garra empleada que por sus condiciones técnicas. Así el Villa del Río que volvió a evidenciar los mismos errores del pasado domingo, se sentía incomodo sobre el terreno de juego. No es de extrañar que las dos primeras ocasiones claras de gol fueran para los verdinegros, primero con una volea de Javi Muñoz con su pierna buena, la zurda, que rozó el larguero de la portería de Zamora y sería precisamente el larguero, el que en el minuto 24 evitaría un golazo de Pedro tras un remate bastante lejano de éste. Sufrían los villarrenses que no encontraban su sitio, faltos de ideas y con muy poquita movilidad sobre el terreno de juego, engarzar dos o tres pases seguidos era prácticamente imposible. Y lo peor es que con el paso de los minutos dichos problemas se fueron acrecentando. Sin embargo, caprichos de este deporte llamado fútbol, se adelantaron en el marcador tras un remate muy bombeado y desde muy lejos de Cris que terminó entrando por la misma escuadra izquierda de la portería de Claudio. Parecía que lo más difícil, podría estar hecho. Pero no más lejos de realidad. Tras el descanso los locales aprietan y por ambas bandas encuentran sus vías de penetración al área rival. Los villarrenses se muestran firmes en su área pero no consiguen mantener el balón en su poder. El técnico local José Ramón Pedraza mueve sus fichas y con la entrada de Alfonso y Pedradas intenta ganar profundidad. Mejor no le pudo salir la jugada. Una absurda pérdida en la salida del juego rojillo, habilita a Alfonso que con la defensa rival totalmente descolocada por lo inesperada de la acción, le permite deshacerse de los dos centrales rivales, para batir a Zamora junto a la base del poste. Este gol premiaba la insistencia local y castigaba a un conjunto visitante que seguía exponiendo muy poquitos argumentos futbolísticos. A partir de ahí el partido siguió con un juego muy deslabazado e impreciso, aunque el balón estaba siempre más en el terreno visitante que en el local. Muy pocas, casi ninguna ocasión de gol hasta el final de la contienda y casi todas provenientes en jugadas a balón parado o en los largos saques de banda tanto de Sergio y Rubio. Al final también hubo tiempo para la polémica arbitral cuando en el minuto noventa en la disputa de un balón aéreo en el área local Sergio carga sobre Javi Nieto derribándolo. Los visitantes piden penalti y los locales insisten que no ha habido infracción alguna. Montenegro Rubiano tira por la calle de en medio y pita falta pero fuera del área y a escasos centímetros de la línea del área. La decisión del colegiado no deja de ser sorprendente ya que si la acción era punible claramente era dentro del área y por consiguiente debería haber pitado penalti y si el contacto no era punible, pues no se debería haber pitado nada. Pese a que su asistente, banderola arriba, reclamó su presencia y tras la posterior consulta, su decisión fue inamovible y aunque la falta era ideal para un especialista como Cris, el balón termina estrellándose en la barrera. En resumen un insuficiente punto para cada equipo condenados a seguir sufriendo en la lucha abierta por evitar el descenso a Primera Provincial.