Crónica partido 4ª jornada de liga de Regional Preferente de Córdoba.
Villa del Río C.F. 3 C.D. CMD-Luque 1
Villa del Río- Zamora, López, Alfonso (Agapito min. 22), Elena, Nico, Damián, Juan Carlos (Yedres min. 92), Muñoz (Jacinto min. 91), Navas (Juanma min.86), Cris y
Miguel Prieto. Luque- José (Telesforo min. 46), Piñi, Bayo, mesa, Zamora (Alejandro min. 77), Raúl, Tato (Juan min. 56), Pipa, Polo (Nacho min. 46), David Sánchez y Pájaro (Kiki min.
46).
Árbitro- Díaz Reyes. Estuvo asistido en las bandas por Rodríguez Jiménez y Flores Sánchez. Demasiados errores de apreciación en su haber y muy descoordinado con sus
asistentes de banda. Amonestó a los visitantes Bayo, Tato, Polo, Pipa, Kiki y Juan y a los locales Cris y Elena, este último en dos ocasiones por lo que fue expulsado en el
minuto 83.
Goles- 0-1 (min. 7) Pipa 1-1 (min. 10) Damián 2-1 (min. 35) Nico 3-1 (min. 40) Muñoz.
Incidencias- Unos 100 espectadores en el Polideportivo Municipal de Villa del Río en una tarde que amenazó lluvia aunque al final el líquido elemento no hizo acto de
presencia.
Comentario- Firma: FRANCISCO J. GARCÍA.
El Villa del Río mostró una cara diametralmente opuesta a la del pasado domingo en Almodóvar y tras realizar un brillante partido endosó la primera derrota liguera al CMD- Luque. Y eso que muy pronto los luqueños se adelantaron en el marcador tras un centro de David Sánchez desde la banda izquierda que Pipa con un remate de cuchara y de espaldas a la portería batiría a un sorprendido Zamora. Peor inicio no había podido tener el partido para los locales que salieron al terreno de juego con unos lógicos nervios fruto de su mala clasificación liguera. Mientras tanto los visitantes daban sensación de equipo homogéneo, con mucho empaque y que sabía en todo momento como jugar el partido.
Pero sin lugar a dudas la clave del mismo estuvo en el tempranero empate local, tan solo tres minutos después del gol visitante. Tras un centro de Alfonso desde su banda ni defensas ni delanteros aciertan con el balón cayendo a los pies de Damián que tras controlar fusila a José. Los visitantes reclamaron la existencia de una falta previa sobre Pájaro pero tanto árbitro como el asistente hicieron caso omiso a las citadas quejas. A partir de ahí el partido se enrareció notablemente ya que unos y otros iniciaron otra batalla, esta vez dialéctica y con un objetivo común, el colegiado y sus asistentes, aquí todo valía y se protestaba absolutamente todo y lo que es más triste es que desde ambos banquillos en vez de calmar los ánimos e imponer una necesaria cordura se incidía aún más en esa tarea. Entre reclamaciones, protestas y piques verbales, el juego tenía iniciativa local y el objetivo era la búsqueda de transiciones rápidas teniendo a Navas y Juan Carlos como objetivos. Precisamente Juan Carlos (minuto 32) pudo hacer el segundo de los suyos tras una vaselina sobre la desesperada salida de José que salió fuera por poco. Tres minutos más tarde los villarrenses tendrían más suerte cuando tras un balón rechazado en la frontal, el central Nico que se había sumado al ataque, enganchó un remate seco que entró junto a la base del poste. Este gol dejó grogui al Luque que cinco minutos más tarde encajaría el tercer tanto tras un sorprendente y lejano remate de Muñoz, desde 45 metros y pegado a una banda, que entró por la misma escuadra de la portería de un sorprendido José. Incluso la cosa pudo ser aún peor para el cuadro naranja tras un claro derribo de Zamora sobre Navas en el área, que desde la grada pareció penalti, pero que Díaz Reyes dejó seguir el juego ante la lógica indignación de la parroquia local. Tras el descanso el técnico visitante, Julio Serrano realiza hasta tres sustituciones en los suyos lo que da idea de lo poco que le estaba agradando su equipo. Tácticamente adelanta sus líneas e intenta buscar la pelota ante un Villa del Río que se repliega para intentar salir a la contra. Pero la actitud y el trabajo del cuadro local fue digno de elogio con un tremendo derroche físico que tuvieron que aumentar al final del partido cuando se quedaron en inferioridad numérica. La lucha era en medio campo y en las áreas las defensas imponían su ley. Aún así Juan Carlos (minuto 51) y Tato (minuto 55) tuvieron sus oportunidades. Con el paso de los minutos las contras locales iban teniendo más fluidez con un Prieto muy activo en su sitio natural, la banda izquierda. Un gol bien anulado al local Juan Carlos (minuto 67), dio paso a una gran parada de Zamora tras un zurdazo envenenado de Juan (minuto 70). Los locales se defendían con acierto pero lógicamente existía el miedo lógico que en cualquier jugada los visitantes anotaran el segundo gol y se metieran en el partido. En esta fase final del envite también hubo polémica con un derribo clamoroso de Raúl a Juan Carlos en el área que a todos pareció penalti, incluso el asistente Rodríguez Jiménez lo indicó desde la banda, pero el árbitro imponiendo su mayor autoridad dejó seguir el juego ante el monumental enfado del bando local. La expulsión de Elena añadió más emoción si cabe a los últimos minutos de juego con un cuadro luqueño totalmente volcado al ataque e incluso Kiki en el minuto 92 solo ante Zamora no acertó a batirlo. Tras cinco minutos de alargue el partido terminó con una justa victoria local que además de los tres puntos en juego sirvió para que recuperaran su imagen habitual y su autoestima, ante un Luque que pese a la derrota encajada demostró ser un duro y correoso rival que jamás dio el partido por perdido.
